A veces, los motivos son super variados: que sea la ilusión de tus padres, que a uno de los dos novios sí le apetezca, que tenga un significado especial para ti, o sinceramente y dándome igual todas las críticas que me caigan por esto: que te parezca más bonito porque te da la gana.

Hay novios tradicionales que no quieren  cambiar "lo que siempre se ha hecho en sus familias" y sinceramente ¿y qué? La libertad también está en que puedan elegir hacer lo de siempre. Que no es obligatorio ser el más creativo e innovador si en realidad tú no lo eres.

Y por supuesto, tenemos novios requetecreyentes que esta es la única forma en la que se imaginan el día de su boda.


Lo que sí me parece importante, es conocer todo lo que debes preguntar si te casas por la iglesia en España y lo que debes tener en cuenta al tomar la decisión de cuál será la tuya. Así que os contamos lo que con nuestra experiencia como wedding planners hemos aprendido:

• Disponibilidad: No es tan fácil como creéis si ya tenéis una fecha en mente. Sobre todo en algunas provincias y con algunas iglesias, la lista de espera es a veces de más de un año. Y sí, esto sigue sucediendo hoy en día. Así que valorad si os importa más la iglesia que elegís o la fecha que tenéis en mente. 

• Horario Parroquial: No os presentéis en la iglesia en el primer hueco que tengáis libre porque será una pérdida de tiempo. Comprobad el horario parrooquial de la iglesia antes de acercaros. Muchas ya os cuentan la disponibilidad por teléfono, así que antes de ir y enamoraros del sitio, estad seguros de que tiene vuestro día. 

Francia es lavanda, es champagne, son los macarons de Ladurée, son las barras de quesos, es el encanto y la elegancia de los colores lavados, son los balcones de reja y las fachadas tan blancas como un vestido de novia.


 Son los croissant y las quiches, son los cubiertos y las mesas bien puestas, los picnics en el parque, son los crêpes, los bolsos de mano, las librerías llenas de polvo, Poiret, Cocó, Yves Saint Laurent, Gaultier.



Es el vino y los viñedos, son los mercados de flores, es París, es Borgoña, es el Ródano y la Costa Azul. Es teatro, es ópera, es Molière, Proust, Sartre o Balzac. Es Renoir, es Monet, son las bailarinas de Degas, es la música en la calle, es el hilo musical, es Aznavour, es Édith Piaf.






















Y todo esto... tiene una explicación. ¡Nos vamos a París este fin de semana! A mi querido queridísmo París. Nos vamos a un festival de bodas que tiene un pintón, pero la verdad, es una excusa de las grandes para pasar tres días en París. Salimos mañana viernes y volvemos el lunes. Ganas locas. De practicar mi abandonado francés, de ver otras formas de entender las bodas, de disfrutar de un rato con amigas, de pasear, de apagar el teléfono, de pensar, de comer, de andar, de subir y bajar, ganas de terrazas con estufas y de recordar.