Cuando unos novios nos dicen, “hemos cogido de fotógrafo a
nuestro primo que hace fotos preciosas en las cenas de familia”, se nos cae el
alma a los pies.
Hemos visto a tantas novias llorar por haberse equivocado
del fotógrafo que eligieron, por haber confiado en alguien que no sabía de
bodas (y no digo de fotografía, digo de fotografía de bodas…que es muy
distinto), por pensar que era un gasto que se podía recortar porque “total, los
invitados siempre hacen fotos”.
De verdad, las fotografías de la boda son un recuerdo para
siempre, que miraréis una y mil veces, en las que muchas veces descubris
detalles que ni siquiera sabíais que habían sucedido, que pondréis en un marco
en casa, que regalaréis a vuestros suegros…¡son seguramente una de las
decisiones más importantes de la organización de la boda!
Foto de LucíaM Photography, a la que aún no hemos conseguido convencer de que tiene que hacer fotos en bodas.
¡¡La queremos!! Pero sí ofrece prebodas y sesiones más tranquilas.
Así que aquí van unos consejos desde la experiencia de una
wedding planner y el ojo de una creativa de publicidad que de esto… algo
entiende:
1. Pensad en qué estilo de fotografía os gusta.
Aunque no entiendas nada de
fotografía, seguro que sabes lo que te gusta y lo que no cuando ves fotos que
querrías tener en tu álbum. Puede que siempre te gusten más las fotos en blanco
y negro, en sepia (arg, ¡nosotros las odiamos aunque no sea políticamente
correcto decir esto), las fotos muy saturadas en las que los colores se ven muy
muy subidos o quizá te gustan siempre las fotos típicas de blog americano en
las que parece que todo está bañado por mucha luz.
Pues piensa primero qué estilo es
el que quieres para tu álbum y después busca fotógrafos que tengan ese estilo.
No vale de nada que cojas al último fotógrafo de moda y pretendas que te haga
lo que nunca hace o peor aún, que no te quedes 100% feliz con tus propias fotografías
de boda.
Foto de los geniales Leafhopper Weddings, que tienen ese "noséqué" que tanto nos gusta
2. El número de imágenes del álbum.
Parece
algo que nadie se pararía a pensar pero seguramente sea uno de los mayores
desacuerdos que tengáis con los fotógrafos si no dejáis esto hablado por
adelantado.
La mayoría de profesionales os
dirán el número de fotografías que suelen hacer y sobre todo, ¡entregar en el
álbum! No hay un número fijo, ni nada que esté bien o mal. Desde 50 a 200 sería
algo lógico para nosotros. Y 120-150 aproximadamente, lo ideal.
¡Ojo! Hablamos de fotografías
elegidas en el álbum, no hechas en la boda. En la boda, lo normal es que os
hagan muchísimas más y que aunque no estén en el álbum, os las entreguen todas
sin retocar.
Fotografía de Click 10, de una Boda Colorín de 2013.
3. Retoques, que no cirujías.
Dejad claro si en el precio se incluyen retoques fotográficos
y en qué consisten esos retoques.
Generalmente, el retoque incluído
no es quitarle 20 años a tu suegra de la cara ni que desaparezca el granito que
te salió en la barbilla (de eso que se ocupe mejor el maquillador); Retocar la
imagen significa ajustar los niveles para que tenga una calidad perfecta, que
se vea nítida, que los colores estén equilibrados y que los detalles
importantes no salgan desenfocados.
¿Es importante? Muchísimo. Y
lleva mucho más tiempo del que podáis imaginar…por eso, nunca contéis con que
cuando os dicen “retoque” os hablan de algo más. Si vais a querer un servicio
más concreto, explicadlo sin miedo para que los fotógrafos estén avisados.
4. Marcas de agua.
Las
marcas de agua son el “mini infartito de los novios” al ver sus fotos de boda y
no saber que iban a encontrarse con un logotipo de por vida. Las marcas de agua
son ese logotipo a pie de foto o ese nombre del fotógrafo sobre la imagen con
una buena transparencia, lo suficientemente alta como para que no puedas ver
otra cosa.
Entendemos que las marcas de agua
son necesarias para que los fotógrafos no se encuentren con que envían imágenes
a los novios para que “elijan” y resulta que nunca más vuelven a saber de
ellos, ni de pagos ni de nada, porque “total, mejor en baja calidad y gratis”.
Que siempre se habla de eso de “cuidado, que en las bodas os pueden timar” pero
os podemos asegurar que de eso también hay mucho novio suelto.
El caso, dejad claro que las fotos que se os entregan NO
LLEVARÁN MARCAS DE AGUA. Que si no tendréis que estar comprando foto a foto,
como si esto fuera el mercado de abastos y no puede ser.
5. Digital o analógico
Elegid qué tipo de álbum querréis
y al fotógrafo que os de esa posibilidad. Hoy en día, casi todos tendrán la
opción digital y lo que empieza a desaparecer es la versión analógica (la de
toda la vida, de la foto pegada en cartulina). Esta decisión no es “para
después” porque os podéis encontrar con que no os hacen lo que queréis.
Las diferencias son sencillas:
a) El álbum digital os dará más
juego para hacer maquetaciones/collage, aguanta más en tiempo porque es menos
delicado, las hojas se abren mejor porque no hay nada que se despegue y el
tamaño de las imágenes puede ser mucho más grande.
b)El álbum analógico consiste en un
álbum al que le añades las fotografías impresas en papel fotográfico. Te
permite más terminaciones (brillo, mate o satén). Te permite modificaciones en
el tiempo (siempre puedes añadir una hoja, cambiar una foto o quitar otra). Y
suelen ser más económicos porque los fotógrafos les tienen que dedicar menos
tiempo de maquetación.
Fotografía de Bibiana Fierro, de una Novia Colorín de 2012.
Dejad
claro y ¡por escrito! el tiempo de entrega de vuestras fotos. Si os casáis en
temporada alta de bodas (mayo a octubre), seguramente os toque esperar un
poquito más porque los fotógrafos no pueden multiplicar sus brazos y no tendrán
tiempo de hacer los retoques. Y si habéis cogido a la empresa de moda, pues
seguramente pase lo mismo.
El caso es que muchas esperas
merecen la pena pero si sabéis que sucederán. El disgusto no suele ser solo por
parte de los novios, ya que a todos nos gusta tener clientes felices en las
bodas y que nadie nos “achuche” con nuestro trabajo…así que por el bien de
todos, aclarad este tema antes de comprometeros.
7. Pensad en vuestro presupuesto para fotografía.
Por
obvio que parezca, hay fotógrafos más caros y más baratos. Incluso packs más
completos y menos completos. Pero sobre todo, si el dinero no os llega, no os
empeñéis en visitar a alguien que esté por encima de vuestro precio. Hay gente
buena que seguro que se adapta a vuestro presupuesto o quizá podéis llegar a un
acuerdo para que cubra menos tiempo.
8. Disponibilidad.
El
orden en el que hay que tener lo fundamental en una boda es el siguiente:
novio/a (esto es muy importante, no lo olvidéis), iglesia o cita en el
juzgado/ayuntamiento, finca, catering y fotógrafo. Así lo haríamos nosotros
siempre. Comprueba que los fotógrafos tienen tu fecha disponible antes de
seguir hablando. Después del “hola, ¿qué tal?” pasad a preguntar
disponibilidad.
9. Haz tus deberes.
No
des nada por obvio ni dejes todo a la imaginación de tus fotógrafos. Si quieres
fotos de tu prima porque es una de las personas más importantes de tu vida,
tendrás que avisar a los fotógrafos de que se fijen en ella. Si tu hermana no
estará en tu casa mientras te vistes, no podrán ver en la bola mágica que es
una persona importante en las fotos.
Aunque generalmente la experiencia es un grado y los fotógrafos tardan
poco en notar quién es importante y quién no, pero no son adivinos y ese día estarán
muy centrados en hacer su trabajo que es hacer fotos preciosas.
Piensa en las
fotos que no queréis que falten y mándales un mail unos días antes de la boda
para que puedan ir preparados. Foto del ramo, foto de los zapatos, foto de las
niñas de arras, foto del detalle que pondrás en los baños, foto de los centros
de mesa…
Avísales de los momentos importantes. Si vas a contratarr
a un coro rociero, cuéntales dónde estarán y en qué momento. Si vas a salir a
decirle unas palabras a tu novio/a, no te olvides de que pueden estar
descansando en ese momento, ¡avísales en tu mail!
Y el consejo estrella: elige a una amiga/familiar que
conozca todo vuestro entorno y pídele que se presente en la boda. Que les
señale con el dedo quién es el padre, la mujer del padre, la madre, la
suegra…las personas importantes que no pueden faltar. Los fotógrafos se lo
agradecerán mucho y tú cuando veas el resultado, ¡aún más!
Imagen de una Boda Colorín Colorado de Instantánea y Toma Primera. ¡Unos profesionales 10 para nosotros!
10. El Buen Rollo
Este es el consejo más importante de todos. De verdad, es el
master del universe de los consejos. La madre de cualquiera de los anteriores.
Que vuestro fotógrafo os caiga bien (comprobad que irá él y no que será
“alguien del equipo. Este es un consejo bonus).
Pensad que esa persona estará delante de vosotros, que será
quien os mire cuando os beséis, que no puede incomodaros, que será a quien
miréis después de al novio cuando estéis en el altar, que no os de pereza, que
no os hable mal, que sepa ilusionarse con vuestra boda (mirad consejitos que os
dimos en este post). Decid NO a los fotógrafos siesos, que hacen las bodas como
churretes, sin amor ni cariño (y eso, creedme, se nota mucho en el resultado).
No os digo que tengáis que iros de cañas ni que vayáis a ser
hermanos de sangre, pero de verdad, hacedme caso…solo un fotógrafo con el que
tengáis feeling, será vuestro fotógrafo perfecto.
Foto de Días de Vino y Rosas, de nuestros preferidos con diferencia, y colocados debajo de "buen rollo" con intención.